Con la venia de la presidencia.
Vale la pena comentar que en esta glosa del Primer Informe del Gobierno Federal, no todo es malo, hay cosas de suma importancia y considero que son diez los programas que en el informe de Gobierno, se reconocen como programas de bienestar, la expresión concreta de las prioridades y énfasis de la política social del gobierno de este gobierno Federal.
El Programa para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores; la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente; el Programa de Apoyo para el Bienestar de las Niñas y Niños, Hijos de Madres Trabajadoras; el Programa Nacional de Becas para el Bienestar Benito Juárez; Jóvenes Construyendo el Futuro; Jóvenes Escribiendo el Futuro; Sembrando Vida; el Programa Nacional de Reconstrucción; Desarrollo Urbano y Vivienda; y Tandas para el bienestar.
Si bien muchos de estos programas son de reciente creación y otros han sufrido cambios, habrá que tomar con seriedad las evaluaciones que se puedan implementar para poder determinar su contribución a la reducción de la pobreza, la marginación y el rezago social.
Lo que es un hecho y hay que reconocer, es que muchas carencias en la operación y la logística han sido denunciadas a lo largo y ancho del país, mismas que tendrán subsanarse para un efectivo cumplimiento de los derechos de los beneficiarios.
Particularmente porque se manifiesta que la estructura programática del primer año de gobierno, responde a un enfoque que considera a la población mexicana sujeta de derechos humanos y sociales, y en el que el gobierno debe ser garante de su efectividad, considerando las características de universalidad, interdependencia y progresividad de los derechos humanos y sociales de todos los mexicanos.
En función de lo anterior, la política social, ha establecido criterios de priorización de los programas, como aquellos dirigidos a zonas de población mayoritariamente indígenas, con mayor grado de marginación y altos índices de violencia.
Uno de los programas que sufrió modificaciones, fue el programa universal "Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores" con un apoyo de dos mil 550 pesos bimestrales para cada una, y sin duda es muy importante ya que el adulto mayor ha construido este país y hoy recibe del gobierno Federal un recurso económico que les ayuda en su vida diaria.
De igual manera, el programa Pensión para el Bienestar de Personas con Discapacidad Permanente, contribuye al bienestar social, igualdad y reducción de la pobreza, dirigida a niñas, niños y jóvenes, indígenas, personas adultas que presenten alguna discapacidad permanente, mediante el otorgamiento de una pensión mensual de mil 275 pesos que coadyuva a mejorar la vida de cada uno de ellos.
El Programa Nacional de Becas para el Bienestar Benito Juárez, sin duda es un programa que ya existía y que se ha modificado para poder revertir la desigualdad social y territorial en nuestro país, otorgando becas prioritariamente a estudiantes que cursen los diversos niveles de educación básica, media superior y superior, en zonas indígenas o con alto nivel de marginación; apoyando, hasta este momento con más de siete millones de becas. Cabe destacar que es inminente la corresponsabilidad práctica que ha sido replicada en muchos países y ha sido evaluada en los primeros niveles de educación, trayendo grandes beneficios a la población, tanto en la salud, en la nutrición y en la propia educación.
En el caso de Jóvenes Construyendo el Futuro se ha buscado aumentar el desarrollo de capacidades e inclusión en el medio laboral mediante becas que reciben de tres mil 600 pesos al mes.
Quiero comentar que el Programa Sembrando Vida, un programa muy importante, que únicamente tenemos en el sur y sureste de este país, ojalá y se pueda implementar en la zona centro y norte, con el podemos evitar el calentamiento global, la erosión de los suelos, beneficiando la producción de oxigeno, buscando abarcar tres dimensiones, social, productiva y financiera.
Insistimos, más allá de la eficiencia operativa, que aún falta que se logren las coberturas y ejercicio del recurso asignado; es fundamental que estos programas sean evaluados, en su propia efectividad, en el abatimiento de la pobreza y la desigualdad social, que conozcamos la metodología que se está implementando para la evaluación cuantitativa y cualitativa para conocer si a través de estos programas estamos reduciendo la pobreza.
Me gustaría comentar que, efectivamente, uno de los institutos nacionales de la economía social, para este PEF 2020 no cuenta con recursos para su operación, quiero comentar que este instituto depende directamente de la Secretaría de Bienestar, atiende proyectos que generan empleos, mejora la calidad de vida de todos los mexicanos; ojalá que todos los compañeros diputados que estén involucrados en la evaluación y aprobación de este presupuesto podamos designar recursos económicos a este instituto, que sin duda es uno de los que mayor generación de empleo arraigan a la gente en su lugar de origen, les permiten iniciar un proyecto y con ello evitar la violencia y delincuencia en el país.
Es cuanto, muchas gracias.
PARTIDO VERDE
