Con la venia de la presidencia;

Los estereotipos, la obsesión por la belleza, la juventud y la perfección física, así como la aspiración de alcanzar un determinado status para ser aceptado en ciertos círculos sociales, o bien, la necesidad de corregir algún defecto físico derivado de malformaciones congénitas, enfermedades o accidentes, han provocado un auge de los tratamientos y cirugías de carácter estético, lo cual ha sido aprovechado por personas que no cuentan con la preparación suficiente para llevar a cabo este tipo de intervenciones y ponen en peligro la salud y en ocasiones hasta la propia vida de quienes deciden someterse a éstas.

Aunque en nuestro país no existen cifras exactas respecto al número de cirugías y tratamientos estéticos que se realizan para mejorar la apariencia, en buena medida porque abundan los lugares y médicos sin certificación que ofertan este tipo de procedimientos, se estima que se llevan a cabo unas trescientas mil operaciones estéticas anualmente.

Según la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva, hasta el año pasado México ocupaba el segundo lugar en número de cirugías estéticas en América Latina, sólo después de Brasil, país en donde se realizan cuatrocientas mil intervenciones.

De acuerdo al Estudio Internacional de Procedimientos Estéticos-Cosméticos, realizado anualmente por la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica y Estética la demanda de este tipo de intervenciones creció alrededor de 28% en nuestro país entre el año 2010 y 2014.

Derivado de este notable crecimiento de la industria de la cirugía estética, en los últimos cinco años han proliferado en México los técnicos y auxiliares que valiéndose del engaño, comúnmente a personas con recursos limitados, se hacen pasar por médicos ostentando diplomas falsos, o bien, expedidos por instituciones sin registro de validez oficial ante la autoridad educativa.

La cirugía estética es la que presenta un mayor número de afectados por malas prácticas. Cada vez son más comunes los casos de personas que pierden la vida o que registran secuelas irreversibles como la amputación tras someterse a un procedimiento o tratamiento estético.

Para combatir esta situación, el Gobierno de la República tiene una estrategia para la prevención y el combate de los servicios médicos ilegales que tiene como objetivo: clausurar establecimientos de prestación de servicios de atención médica que incumplen con la regulación sanitaria; combatir la presencia de clínicas de cirugía y procedimientos estéticos que ofrecen servicios que representan un riesgo para la salud de la población; así como incrementar la información sobre establecimientos que incumplen la regulación y reforzar las acciones de verificación de los mismos.

No obstante lo anterior, el problema subsiste, en parte debido a los vacíos legales que son aprovechados por los charlatanes que se ostentan como médicos cirujanos sin contar con la formación requerida para ello.

En este contexto, el grupo parlamentario del Partido Verde considera imprescindible incrementar la vigilancia y las restricciones para la operación de las unidades que ofrezcan o realicen servicios de cirugía estética o reconstructiva, endureciendo las sanciones para aquellos establecimientos a cargo de personal que no cuente con los títulos profesionales y certificados de especialización correspondientes. Por este motivo votaremos a favor de la aprobación del presente dictamen de la Comisión de Salud.

Es cuanto.

PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO