Muchas gracias presidenta.
Compañeras y compañeros diputados.
Es para mí un honor estar en esta tribuna hablando de este tema, especialmente porque fue justo el año pasado, en el primer periodo que tuvimos, que traje este tema a la Cámara de Diputados junto con la fundación Reinserta.
Las niñas y los niños que nacen y crecen en estos centros penitenciarios no se desarrollan bajo condiciones normales.
No están involucrados en la comisión de ningún delito y no tienen la capacidad para comprender por qué están en reclusión, pero pasan los primeros años de su vida aislados y expuestos a situaciones de mucha violencia y hostilidad. Además, el confinamiento de estos niños ocurre dentro de lugares que no tiene la infraestructura adecuada para su descanso, educación y recreación, esto los deja en riesgo, al no tener la protección de sus derechos más elementales, y comúnmente les deja traumas para el resto de sus vidas.
Como legisladores estamos obligados a hallar soluciones para que estos infantes no se queden "invisibles", como lo están actualmente dentro de los derechos y frente a diferentes autoridades.
Una de las principales razones para la falta de atención de dichas niñas y niños ha sido la ausencia de estadísticas oficiales sobre ellos.
Como ya he comentado, la asociación civil Reinserta un Mexicano ha reportado 377 menores nacidos y radicados en centros penitenciarios, 120 de ellos se encuentran en el reclusorio de Santa Martha Acatitla, con sus madres. No obstante, un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México en 2011 dijo que el universo total de infantes en reclusión podría superar los 800 niños.
Es por este motivo que el Partido Verde insistió y ha insistido desde el principio de esta legislatura, en la necesidad de generar un registro que permita conocer con precisión los datos de estos menores.
Durante el primer año de ejercicio tuvimos la oportunidad, como ya lo dije, de presentar una iniciativa para reconocer los derechos de los niños en reclusión y precisar la obligación que tiene el Estado de velar por el ejercicio de sus derechos fundamentales.
En esta, se propuso incluir a los niños en reclusión dentro del sector de "situación de vulnerabilidad", que prevé la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, para abrir así la puerta para que las autoridades destinen recursos a la salvaguarda de sus derechos y la adaptación de la infraestructura penitenciaria en favor de su desarrollo integral.
Es aquí donde encontramos grandes coincidencias con el dictamen que estamos discutiendo el día de hoy que presenta la Comisión de Salud a fin de hacer valer en el artículo cuarto constitucional lo siguiente: "En todas las decisiones y actuaciones del Estado se velará y cumplirá con el principio del interés superior de la niñez, garantizando de manera plena sus derechos".
Celebramos por ello la aprobación de esta reforma avalada por la Comisión de Salud y manifiesto el voto a favor de quienes conformamos el Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista, reconocer como sujetos de derecho a la asistencia social de los niños y niñas que nacen y permanecen dentro de los centros penitenciarios, por ser hijas o hijos de madres reclusas, es un paso adelante en la consolidación de las políticas públicas diseñadas en beneficio de la niñez de nuestro país.
Muchas gracias presidente.
PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO
