Con la venia de la Presidencia;

Compañeras Diputadas; Compañeros diputados:

La educación ha demostrado ser la forma más efectiva para erradicar la desigualdad en el acceso a las oportunidades de desarrollo. De esta manera, un sistema educativo sólido es un elemento estratégico para el desarrollo del país, de ahí la importancia de garantizar un marco jurídico sustentado en la formación, la actualización constante, la transparencia y el reconocimiento a la labor docente.

Los esfuerzos por convertir a la educación en nuestro país como un mecanismo de progreso y de auténtica movilidad social han enfrentado serios problemas. Las Reformas han sido muchas y los resultados no han sido los esperados.

Por ejemplo, la pasada Reforma Educativa, no fue apreciada en su justa dimensión y por el contrario, fue censurada para un grupo del magisterio nacional que busco su desmantelamiento.

En este mismo recinto, en días pasados analizamos y aprobamos reformas a nuestra Constitución con las que se buscó fortalecer una política pública que garantice la excelencia educativa en nuestras niñas, niños, adolescentes y jóvenes mexicanos; y la rectoría del Estado en los asuntos educativos.

En ese primer momento, se lograron asegurar mejores condiciones de trabajo en los centros educativos, se garantizaron mecanismos de actualización a los programas de estudio para construir una educación de calidad en favor de los estudiantes del país.

Impulsamos una iniciativa integral para atender las necesidades prioritarias del Sistema Educativo Nacional, que valorara la labor docente sin vulnerar los derechos adquiridos de los propios docentes.

Se mantuvieron los procesos de evaluación para identificar aspectos de mejora y evitar vicios como la venta de plazas, el compadrazgo y el pago de favores a costa del patrimonio educativo.

En esa ocasión quedó claro que pese a las diferencias políticas se garantizó la inclusión en el sistema educativo, que la educación sea de excelencia y con ello, mejorar la calidad de vida de la sociedad en general.

Hoy tenemos de vuelta la minuta revisada por nuestros compañeros Senadores, lo que nos brinda una oportunidad para realizar modificaciones de más amplio aliento e impacto que las que ya se habían realizado con gran responsabilidad y compromiso político.

Celebramos los acuerdos que en esta nueva pieza legislativa se han alcanzado para integrar en el texto constitucional rubros tan importantes como la enseñanza de las matemáticas y la lecto-escritura.

Coincidimos con la definición de una Estrategia Nacional de Mejora de las Escuelas Normales y en la obligación del Estado porque las condiciones de este importante nivel educativo cumpla con sus funciones pedagógicas.

Nos congratulamos por la inclusión de un artículo transitorio para asegurar recursos suficientes para que la educación superior y las instituciones que la imparten, cuenten con recursos suficientes para lograr sus funciones sustantivas. Fue nuestra una preocupación por la que propusimos una reserva al dictamen anterior y que hoy vemos con mucho agrado que se ha retomado en el nuevo dictamen.

Ahora nos preocupa que quede bien establecido en nuestra Constitución la obligación del estado por garantizar materiales, infraestructura educativa y que las condiciones del entorno educativo sean idóneas y contribuya a los fines de la educación.

Compañeras y Compañeros Diputados:

Por todo ello, a nombre de quienes integramos el Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México, anuncio nuestro voto a favor del presente dictamen, pues insistimos en que de la aprobación de este Dictamen derivarán mejores prácticas en materia educativa para beneficio de la niñez y la juventud mexicana.

Es una cuestión de reflexión para construir un mejor México precisamente con una educación de calidad y excelencia.

ES CUANTO, muchas gracias.